En los tiempos de pandemia del Covid 19, estando en casa por la cuarentena, inicié algo que tenía en mente desde hace bastante tiempo, pero que entre las presentaciones y proyectos laborales no había tenido la oportunidad de darle cuerpo. Aprovechando el tiempo, decidí iniciar el relato de esta historia y aclarar algunas dudas o mitos relacionados a mi trayectoria en el mundo de la salsa en Venezuela y cómo llegué a ella. Esto con el fin de compartir mi punto de vista y anécdotas con muchos de ustedes, quienes han seguido esta tendencia hasta lo que hoy en día es conocida como nuestra querida salsa baúl.
Durante mi infancia, viví en Catia - Alta Vista junto a mi padre José Cervantes y mi madre Carmen Villarreal (emigrantes colombianos), quienes llegaron con tres de mis hermanos a Venezuela. Habían vivido un tiempo en Los Llanos y posteriormente se establecieron en la Capital. Ya estando en Venezuela, nuestra familia creció a seis hijos (tres hembras y tres varones), de los cuales yo me convertiría en el menor de esta descendencia.
Después de mi nacimiento en 1972, mi familia se muda a La Castellana - Chacao, donde tengo mis primeros recuerdos de la infancia. Uno de ellos era la carpintería que tenía mi padre, donde mis hermanos llegaron a trabajar con él y en ocasiones, yo también lo acompañaba. Para ese entonces, recuerdo muchas veces despertar escuchando la salsa de los años 70’s y 80’s, que sonaban en algunas emisoras latinas y populares de la época. Canciones como “No me digas que es muy tarde” de Ismael Miranda; al igual que cantantes como Celia Cruz, Oscar D'León, Héctor Lavoe y Willie Colón. También recuerdo que disfrutaba de toda la magia del merengue de los 80’s, la cual nos dejó grandes momentos en la vida de nuestra generación.
Ya a finales de los 80’s, estando en bachillerato en el Gustavo Herrera, un amigo en el liceo llamado Amaya Jackson nos invitaba a su casa, donde tenía una gran colección de cassette de minitecas que llamaron mucho mi atención, entre los que recuerdo estaban: ZC, Infierno, Tierra Rara, La Máquina, Betelgeuse y Magic. Mi amigo me los prestaba para escucharlos, y podría decir que así fue como comenzó mi atracción por las minitecas y las mezclas.
Más adelante en El Pedregal, un vecino llamado Oswaldo Matamoros, me dió la oportunidad de trabajar en su miniteca “Hot Season” como ayudante y cargador de equipos. Posteriormente pude aprender a mezclar de la mano de Oswaldo a quien le decían “Paco” porque siempre andaba con un radio trasmisor aficionado (tal vez el WhatsApp de hoy). Con esta miniteca realizamos bodas, quince años, verbenas y eventos sociales en El Pedregal como Cruz de Mayo.
Después de un tiempo, mis hermanos mayores también se interesaron y creamos una miniteca llamada “Air Queen”, donde yo estaba a cargo de toda la logística y operaciones. Con nuestra miniteca, realizamos diversos eventos con Empresas Polar, fiestas de fin de año, acompañamos a la Dimensión Latina en la Hacienda Mi Chiquita y participamos en actividades de un proyecto en Empresas Polar llamado “Calidad Total” en el año 1990. Por otra parte, asistimos a eventos públicos en Charallave, específicamente en el Club Los Peñones, el cual posteriormente volvería a visitar como Carly Dj. Para ese entonces yo era un Dj que colocaba todo tipo de música (lo que estaba de moda), mucho merengue, changa, reggae, bachata rosa y por supuesto salsa.
Antes yo no había conocido DJs que mezclaran el género (salsa), así que una vez que aprendí a mezclar, decidí arriesgarme hasta lograr realizar mix de salsa con la música que disponía en la miniteca.
Nota 1: De la época logré rescatar un set de 1992, que pronto compartiremos con ustedes por este medio, extraído de una grabación que sacamos de un cassette.
Otra anécdota que no puedo dejar de contarles es sobre mi llegada al Centro Comercial Chacaíto en el año 92. Un vecino de El Pedregal que era Dj residente de Discoteca, llamado Mauricio Molina, estaba buscando un ayudante debido a que para ese entonces las discotecas solían abrir muy temprano, desde las 6 pm hasta las 6 am (era bastante forzado). Por lo que a través de amigos en común, llega a sus oídos mi nombre y me lleva a una discoteca en el Centro Comercial Chacaíto llamada Alfis, que años después pasaría a ser nuestra famosa Status.
En este local fue que aprendí a musicalizar (ya de otra manera), por lo que no eran los set preparados de las fiestas privadas. Para ese entonces, mi trabajo era asistir al dj residente en las horas iniciales y muchas veces me daban la oportunidad de cubrir una que otra noche, más el día libre.
Nota 2: Luego les contaremos cómo pasó a ser el local salsero más emblemático del baúl de la salsa.
Chacaíto desde que lo conozco siempre fue un punto de la ciudad muy comercial y nocturno, donde funcionaron muchas discotecas de diversos ambientes, en su mayoría más de tendencias latinas. No eran salseras en su totalidad pero sí tenían esa esencia del caribe y sus ritmos, como salsa, merengue, baladas, las llamadas hora loca con diversos sonidos y tendencias musicales de moda. Por lo que, siendo una zona popular de la capital de fácil acceso, podría destacar que estar ahí durante casi 9 años, fue un factor que me ayudó (de alguna manera) a consolidar lo que hoy disfrutamos, esa salsa que llevamos en nuestro corazón.
Es así como Chacaíto se consideraba un lugar de estilo más latino, mientras que las discotecas más pop estaban ubicadas en la zona de las mercedes. También existían las salas donde presentaban música en vivo las orquestas de salsa, merengue y gaitas, las cuales no podían faltar en las temporadas que iniciaban mayormente en octubre hasta fin de año.
Por otra parte, algo que me preguntan siempre, es ¿De dónde viene ese nombre Carly? En mi infancia, cuando llegamos a El Pedregal (por ser hijo de colombianos) me decían califa y más adelante, “Giovani el Oso” (un amigo de la infancia) me comenzó a llamar Carly. Con el paso del tiempo, ya me conocían mis vecinos con este nombre y por lo tanto, cuando llegué a Chacaíto, ya todos me decían Carly.
Esta es mi historia y mi punto de vista de lo que sucedió en ese entonces ¡Espero que lo hayan disfrutado! Más adelante les contaré el paso de Alfis a Status y sus anécdotas.
Carly DJ.
Caracas 16 de JUNIO de 2020.
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